La distancia
más larga, dirigida por la joven cineasta venezolana Claudia Pinto; película que se
caracteriza por ser la primera producción venezolana que logra ópera prima en
un festival de cine; narra un emotivo drama familiar desarrollado entre Caracas y
la Gran Sabana, además de ellos, esta
cinta deja ver la
grandeza de los paisajes naturales de Venezuela y la realidad de un país que da
vida a una noble historia que según los críticos harán “renacer el amor por un
país”.
La distancia más larga
es la primera película que se filma casi en su totalidad en la Gran
Sabana, donde el equipo estuvo rodando durante más 40 días en lugares que
incluyen la cima del Roraima. Para La distancia más larga esta región de
nuestro país no fue sólo una locación, sino el punto de partida y la
inspiración que impregnó todo el proceso de creación de la película.
Se
basa, en la historia de Martina (Carme Elias), una mujer española de 60 años, que recibe
la mala noticia de que está a punto de fallecer y decide viajar a la Gran
Sabana, el lugar en el que un día fue feliz, para decir adiós a la vida. Su
intención es subir el monte Roraima y a mitad de camino dejarse morir, pero
sabe que sin alguien que le acompañe no lo puede lograr. La repentina visita de
su nieto Lucas (Omar Moya) no podría llegar en mejor momento. El joven, ajeno a
la situación en la que se encuentra su abuela, acepta acompañarla en su viaje
final, sin embargo no se quedará impasible cuando se entere de que realmente le
está guiando hacia su muerte.
Las
relaciones familiares, la redención y la libertad de vivir cómo y cuándo uno
elige, son los temas centrales de esta prueba latente de que en la vida existen
las segundas oportunidades.
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