Por: Carlos Jelambi
Escrita
y dirigida por Paul Feig, Spy tiene a Melissa McCarthy, como la
gente de la CIA que menos puedes esperar; a Jason
Statham, como el experimentado y
siempre engreído espía; y a 50 Cent
realizando uno de los mejores cameos del año, en la película más graciosa del
año.
McCarthy interpreta a Susan
Cooper, una agente secreta detrás del escritorio, quien-después de haberse
agotado las opciones- obtiene finalmente el chance de sacar el Jack Bauer que lleva por dentro y
lanzarse al campo- con restricciones claro, así no le preste atención. Por
supuesto hay una bomba y por supuesto hay agentes dobles. Hemos visto esta sinopsis incansables
veces, nueve de cada diez no funciona. Spy
es la diez.
Cooper
rompe con varios estereotipos gracias a su gordura. Y no lo digo en un mal
sentido, sino que Hollywood nos tiene acostumbrados a creer que un actor con la
cadera más grande que el pecho solo puede triunfar por suerte de tontos. No
esta vez. Ella no es torpe o estúpida, tampoco es tímida o asustada. Su único
defecto-si es que se puede esto se puede considerar uno- es estar enamorada del
agente Bradley Fine(Jude Law en uno de sus mejores papeles).
Ella lo ha ayudado en numerosas misiones, solo susurrándole al oído.
Paul Feig nos trae una comedia graciosa por ocasiones
absurdas a raíces de sentimientos reales y palpables. Spy es una de las mas listas parodias de James Bond que se pueden ver. Es destacable como juega con los
estereotipos masculinos. Extrañamente, aquí son las mujeres quienes tienen el
control, suficiente para la frustración del rudo agente Rick Ford- interpretado por Jason
Statham en un rol que parece una parodio de sí mismo- quien no para de
meterse en el camino de Susan. McCarthy puede ser la protagonista, mas no hay
dudas de que él es lo mejor de toda la película.
Incluso
el villano es una mujer(Rose Byrne).
Ella es básicamente Paris Hilton versión
traficante de armas. Byrne y McCarthy intercambian insultos en un par de
ocasiones, y es una pena cuando esos momentos terminan, porque son excelentes.
Miranda Hart encarna a la mejor amiga de Susan, Nancy. Ella es uno de mis principales
problemas con la película porque sus chistes suelen parecer forzados. Aunque
los que funcionan, funcionan.
Spy es fácilmente comparable con Kingsman y no cuesta mucho ver por qué. Ambas son cómicas y
violentas parodias de Bond, aunque pienso que Spy es mas cómica. Por cierto, se
me olvidó mencionar lo violenta que es esta cinta….es muy. No llega a gore, pero hay un par de escenas que “se les fueron de las manos” y pueden
resultar un poco desagradables para los espectadores. Yo no tuve problema, pero
los que estaban a mi lado sí.
Se
reirán alto y por un buen rato con esta película. Spy es lo más gracioso que le
ha pasado al genero de espionaje en un largo tiempo. Lo que la diferencia de
otras parodias como Red o Kingsman es
que Feig nunca pretende no estar
realizando una comedia. Nunca se toma a sí misma demasiado enserio. También hay
tensión y giros inesperados, y la acción esta magníficamente coreografiada y
grabado. Mejor que muchas cintas 100% de acción, no bromeo.
No
todo es perfecto. Varios de los chistes son forzados, la violencia llega a ser
excesiva(e innecesaria) y el final es algo abrupto. Pero al final del día, la
verdadera forma de medir a una comedia siempre es por qué tanto te hayas reído.
Siempre que las carcajadas excedan a las usuales, todo está bien. No se la pierdan.
Spy obtiene un 3.7/5.
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