Después de saber que tres mujeres habían sido detenidas durante una proyección y que otra mujer fue arrestada por masturbarse en público, cien adolescentes han provocado una estampida para entrar en un cine de Florida sin pagar después de que no quisiesen venderles entradas, ya que la película está calificada para mayores de 18 años.
Tras ver el suceso, algunos espectadores llamaron a la policía, quienes apenas podían controlar a los jóvenes. El supervisor de la sala informó a las autoridades de que "simplemente comenzaron a correr. Tratamos de controlarlos cerrando un lado de las puertas e intentando sacarlos, pero son muchos... Los miembros de seguridad están ayudando pero no es suficiente".
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